107 nuevos notarios, conservadores y archiveros nombrará el gobierno. Lo explica por la necesidad de dar más competencia al sistema.
Pero es más de lo mismo. Los notarios son designados a dedo por las cortes de apelaciones y el Pdte de la República, y se quedan con el cargo hasta cumplir 75 años. Una receta perfecta para el nepotismo y la pituto-cracia…. donde corren con ventaja los hijos, hermanos, amigos y parejas de otros notarios, de altos funcionarios o de parlamentarios.
Los últimos 3 gobiernos han prometido cambiar el sistema, y nada. Más de 10 proyectos de reforma juntan polvo en el Congreso, y nada. Nadie se atreve a ponerle el cascabel al gato.
¿Qué hacer? Licitar los cupos en concurso público, fiscalizar que se cumplan los aranceles, reemplazar trámites por firma electrónica, poner plazos a las concesiones o, más simplemente, permitir, como en otros países, que cualquier persona que cumpla los requisitos legales pueda instalar una notaría.
Un tema que ahora investigará la Fiscalía Nacional Económica. Una luz de esperanza en un asunto en que los intereses en juego parecen ser demasiado poderosos.
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